La Runa Laguz encarna la esencia del agua: fluidez, intuición y movimiento constante. Simboliza el fluir de las emociones y las relaciones, la capacidad de adaptarse y dejarse llevar por la corriente de la vida con confianza y serenidad.
Este signo vikingo anuncia un período de armonía emocional y claridad interior. Sin embargo, también señala la necesidad de purificación y limpieza, un llamado a reorganizar tus prioridades y reencontrar tu centro. Laguz te recuerda que escuchar a tu intuición es clave: tu sabiduría interior ya tiene las respuestas.
Es un buen momento para dejar atrás cargas innecesarias y permitir que todo fluya con naturalidad. Como el agua, la vida encuentra siempre su cauce, y Laguz te anima a confiar en ese proceso.